Una nueva caravana de migrantes salió de Honduras el 29 de marzo del 2021. Su destino como el de muchos migrantes es los Estados Unidos donde buscan darles una mejor vida a sus hijos y poder mandar dinero a sus familiares que viven en Honduras. La caravana se inició a las cuatro de la mañana con más de 30 mil migrantes quienes caminaron hacia la ciudad de Corinto para llegar primero a Guatemala, de ahí a México y finalmente a los Estados Unidos.  El 30 de marzo el presidente de Guatemala firmó un decreto por el medio del cual desplegó al ejército para proteger la frontera y evitar así que los migrantes entraran a Guatemala. La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, habló con el presidente de Guatemala y le dio las gracias por todo el trabajo que su país ha hecho al tratar de parar a los migrantes. La señora Harris fue designada por el presidente Joe Biden para tratar de resolver la crisis migratoria de la frontera con México. No solo las personas de Centro América intentan llegar a los Estados Unidos, sino también los mexicanos.

Esta es una crisis migratoria en la que más de 20 mil personas están en la frontera de los Estados Unidos cruzando ilegalmente. Lo que preocupa a las autoridades no solo son los riesgos que estos migrantes corren al caminar largas horas bajo el sol con niños o personas mayores, pero también por la pandemia. Los Estados Unidos no tienen la capacidad de poder tener tantos migrantes en las estaciones migratorias y mantener los seis pies de distanciamiento social. El virus se ha hecho presente en estos campamentos, infectando a algunos migrantes. Al eliminar la póliza del expresidente Donald Trump de “La Cero Tolerancia” los migrantes no pueden ser deportados por cruzar ilegalmente para pedir asilo.  Lo que está haciendo los Estados Unidos es deportar a los migrantes bajo el título 42, indicando que los migrantes son un riesgo para el bienestar de los Estados Unidos a causa del Coronavirus. 

Lo que preocupa a los analistas de inmigraciones es que los migrantes están siendo deportados a México lo cual pone a México en la misma situación que los Estados Unidos está tratando de evitar.  Además, México tiene uno de los niveles más altos de pobreza en todo el mundo. Analistas migratorios estiman que si los migrantes siguen siendo deportados de los Estados Unidos hacia México una crisis de trabajo podría afectar a la población mexicana. Los presidentes de los Estados Unidos, México, Guatemala y El Salvador han estado en conversaciones tratando de formar un plan para deportar a los migrantes de una forma humanitaria. 

Mientras la administración del presidente Biden intenta crear un plan de migración que ofrezca asilo a estos migrantes, más y más personas llegan a la frontera. La vicepresidente Kamala Harris está haciendo su mejor esfuerzo para controlar esta ola migratoria. Solo el futuro dictará que será de esas personas que simplemente intentan buscar una buena vida para ellos y para sus hijos.